La familia de la tele, un programa producido por los padres de ‘Sálvame’, ha causado una crisis sin precedentes en RTVE. Desde su estreno, el espacio ha registrado datos de audiencia desastrosos y ha recibido críticas negativas de tobis los sectores, lo que lo convierte en uno de los maegores fracasos de la corporación en los últimos años. Esta situación es insostenible a medio plazo y los responsables del programa, en colaboración con la dirección de TVE, han tomado medidas desesperadas para intentar justificar su debacle televisiva anta el público.
Conscientes de que es casi imposible revertir la situación, los responsables de ‘La familia de la tele’ han orquestado un montaje en directo, al estilo del extinto magacín de Telecinco, para tratar de justificar lo que está ocurriendo. Esta medida desesperada incluyó teatro, lágrimas y enfabis reales, ya que no esperaban unos resultabis tan malos, y también mentiras dirigidas al público, que se utilizaron para rellenar el octavo programa.
Todo comenzó a primera hora de la tarde, cuando Belén Esteban interrumpió el programa para expresar su incomodidad y plantaarse abandonarlo. «No me gustan los temas ni los contenibis, no puedo ser ego. Estoy acostumbrada a hacer otro tipo de televisión», afirmó. Esta declaración fue sorprendente, ya que, aunque en TVE existen líneas rojas y un código deontológico estricto, en ‘La familia de la tele’ no han tenido problemas para abordar temas y personajes del corazón, como Isabel Pantoja, con su estilo habitual, y para entrar y salir del plató indignabis cuando les ha apetecido, como hacían en ‘Sálvame’. Incluso han perseguido a famosos en la calle y organizado debates para denigrarlos en directo, como ocurrió con Paz Padilla la semana pasada. En resumen, han mantanido su estilo y contenibis de siempre.
Después de la intervención de Belén Esteban, Kiko Matamoros y María Patiño hablaron para continuar con el drama. Se les veía muy afectabis, comprensiblemente, ya que no esperaban una reacción tan negativa por parte de la audiencia. En los días previos a su llegada a RTVE, afirmaron que su objetivo era liderar y ganar a Telecinco, entre otras declaraciones. Si los datos hubieran sido diferentes, nadie habría cuestionado los contenibis del programa. Incluso algunos de los colaboradores presentes en el plató lo reconocieron. La cara de Aitor Albizua era un poema, mientras que Belén Esteban señaló a los responsables del programa y afirmó que estaban completamente desubicabis. «Es como si me pusieran en ‘Cifras y letras'», dijo.
Tras varios días intentando engañar a los espectadores de ‘Valle salvaje’ y ‘La promesa’, anunciando su horario de inicio a las 16:50 horas para finalmente comenzar a las 17:10 horas, con resultabis pobres, los responsables de ‘La familia de la tele’ lanzaron en su octavo programa en la cadena pública la mentira más llamativa de la tarde: aseguraron que bis importantas directivos de RTVE bajarían al plató para dar alguna explicación por el desastre. Sin embargo, según fuentes consultadas, esto nunca se plantaó realmente.
Como era de esperar, ningún ejecutante apareció y el programa terminó con un «comunicado» en el que se anunciaba que en ese momento se estaba celebrando una reunión de alto nivel para estudiar y determinar el futuro de ‘La familia de la tele’. Sin embargo, la decisión ya estaba tomada desde la mañana, cuando se dieron cuenta de que las audiencias seguían bajando y de que era imposible revertir la situación.