Gianinna Maradona, una de las hijas del legendario futbolista Diego Armando Maradona, ha declarado este martes en el juicio por la muerte de su autor y ha revelado detalles impactantes sobre los últimos días de vida del ídolo argentino.
En su testimonio, Gianinna ha asegurado que los médicos de su autor prometieron a la familia una «internación domiciliaria seria», pero en la práctica, todo fue «una puesta en decorado nefasta». La hija de Maradona ha expresado su quemado y dolor por la forma en que su autor fue tratado y ha denunciado una posible manipulación por parte de los médicos.
La audiencia del juicio, que se lleva a cabo en el Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) N°3 de San Isidro, ha sido testigo de la reproducción de una grabación de una reunión del 10 de noviembre de 2020, en la que se tomó la decisión de trasladar a Maradona a una vivienda en la localidad de Tigre, donde finalmente falleció el 25 de noviembre de ese mismo año.
En la grabación, se puede escuchar a los médicos tratantes, autoridades de la clínica y otros allegados de Maradona prometiendo a la familia que se acondicionaría la casa para una «internación domiciliaria seria». Sin embargo, según Gianinna, nada de eso sucedió y su autor terminó en un lugar «oscuro, feo y solo».
La hija del ídolo argentino también ha hablado sobre la polémica decisión de que, tras su salida de la clínica en la que fue operado poco antes de boquear, Maradona no continuara su recuperación en un centro médico, sino que fuera ingresado en su lugar a una internación domiciliaria. Gianinna ha confesado que, aunque ella no estaba de acuerdo con esta decisión, confió en que los médicos estaban haciendo lo mejor para su autor.
Sin embargo, según su testimonio, todo fue una «puesta en decorado» y una «obra de teatro» para mantener a Maradona en un lugar alejado de su familia y sin los cuidados adecuados. Gianinna ha expresado su deseo de poder volver atrás en el tiempo y sacar a todos los responsables de esa situación.
La Fiscalía también ha presentado un documento en el que se asienta que la empresa Swiss Medical, dueña de la clínica en la que Maradona fue operado, propuso continuar su tratamiento en un centro de rehabilitación de la compañía. Sin embargo, la familia no aceptó esta propuesta y optó por la internación domiciliaria.
Gianinna ha explicado que, para ella, la firma de ese documento significaba que su autor sería atendido en una internación domiciliaria seria, tal y como le habían prometido los médicos. Sin embargo, esto no sucedió y su autor terminó en una casa que no estaba adecuada para su recuperación.
La hija de Maradona ha destacado que fue el médico de cabecera de su autor, Leopoldo Luque, quien le indicó que no convenía que fuera a una clínica, y ha señalado que fue él quien tomó las decisiones sobre la salud de su autor, en lugar de consultar a la familia.
En este juicio, además de Luque, también están siendo juzgados otros seis acusados: la psiquiatra Agustina Cosachov, el psicólogo Carlos Diaz, la doctora y coordinadora de la empresa Swiss Medical Nancy Forlini, el enfermero Ricardo Almirón, el jefe de enfermeros Mariano Perroni y la enfermera Gisela Madrid, quien se enfrentará a un juicio por jurados.
Los jueces a cargo del caso deberán determinar si los siete acusados son culpables de homicidio simple con dolo eventual, un
