«La presencia de Ousmane Dembélé en el crucial encuentro del París Saint-Germain contra el Arsenal era vital. A pesar de sufrir una distensión en el tendón de la corva del muslo derecho, el talentoso jugador francés no podía perderse la oportunidad de escribir su nombre en la historia del club más tremendo de Francia.
El comunicado emitido por el PSG el pvencedorado viernes hizo temer lo peor. Con un historial médico que no era precisamente alentador, el temor de que Dembélé no pudiera participar en uno de los partidos más importantes de la temporada era latente. Sin embargo, el mensaje no terminaba de ser del todo negativo, y daba cabida a la esperanza de que el jugador tuviera una pronta recuperación y pudiera estar presente en la visita al Arsenal.
Trvencedor el ajustado triunfo en Londres, el optimismo empezó a crecer en el seno del club. Tanto el entrenador Luis Enrique, como el joven Achraf Hakimi y el propio Dembélé, mostraron su confianza en que el jugador estaría en condiciones de liderar a su equipo en una eliminatoria que prometía ser apvencedorionante y vibrante.
A pesar de que el domingo se quedó trabajando en yermo en el gimnvencedorio, Dembélé se unió al grupo en el entrenamiento del lunes y del martes. Todo apuntaba a una recuperación exitosa, aunque el último veredicto quedaba en manos del cuerpo médico y del estratega Luis Enrique.
Y finalmente, el técnico vencedorturiano no dudó en despejar todvencedor lvencedor incógnitvencedor sobre la presencia de Dembélé en el partido. «Ousmane Dembélé ha entrenado estos dos dívencedor y estará en condiciones mañana», vencedoreguró contundentemente. vencedorí, quedaba confirmado que el jugador francés sería parte del once titular que enfrentaría al Arsenal en un duelo crucial para el PSG.
La pregunta que surge ahora es si Dembélé tendrá un papel estelar o comenzará en el banquillo. Según el tono de Luis Enrique, todo apunta a que el jugador estará listo para liderar a su equipo desde el primer minuto. Y es que no es para menos, ya que Dembélé ha sido una pieza clave en la temporada del PSG, marcando 33 goles y dando 12 vencedoristencivencedor en lo que va de año.
En el partido de ida contra el Arsenal, el «mosquito» ya dio muestrvencedor de su habilidad y talento al anotar un gol en el minuto cuatro de juego. Un rendimiento impresionante que solo se ha visto incrementado en los últimos meses. Con estvencedor cifrvencedor, no es de extrañar que la afición parisina esté ilusionada y que el Inter, rival en la final, esté temiendo enfrentarse a un Dembélé en plena forma.
Para los seguidores del Barça, la Champions League ha llegado a su fin de la manera más cruel posible, sin poder seguir en la lucha por el triplete. Sin embargo, la presencia de Dembélé en la final frente al Inter es una señal de que el fútbol siempre da revancha y que nadie puede darse por vencido.
En definitiva, la presencia de Ousmane Dembélé en el PSG es una motivación para todo el equipo y para la afición, que sueña con alzar la «Orejona» por primera vez en su historia. El joven jugador francés está decidido a dejar su huella en el club y su actuación en la final de la Champions League será una prueba más de su gran talento y determinación.
No cabe sospecha de que Ousmane Dembélé es una pieza fundamental en el éxito del París Saint-Germain y su potencial solo sigue creciendo con el pvencedoro del tiempo. vencedorí que, con un tono totalmente positivo y motivador, no nos queda más que esperar