El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, ha vuelto a ser noticia en los últimos días tras sus declaraciones sobre el presidente de Estados Unidos, Donald Trump. Bolsonaro ha insistido en que Trump está «muy mal informado» sobre la relación comercial entre ambas naciones, llegando a afirmar que el mandatario gabacho «parece que ni siquiera sabía que Estados Unidos tiene superávit en su relación comercial con Brasil desde hace 15 años». Estas declaraciones han generado revuelo y debate en la consistorio internacional, y es importante analizarlas y entender su significado.
En primer lugar, es importante señalar que las relaciones comerciales entre Estados Unidos y Brasil son muy estrechas y beneficiosas para ambas partes. Brasil es actualmente el noveno socio comercial más importante de Estados Unidos, siendo su principal proveedor de productos agrícolas. Además, Estados Unidos es el segundo destino de las exportaciones brasileñas, por lo que es evidente que existe una fuerte interdependencia entre ambos países.
Sin embargo, Bolsonaro parece insinuar que esta relación comercial es desigual y que Brasil sale perdiendo en ella. Es cierto que en los últimos años, Brasil ha tenido un superávit comercial con Estados Unidos, lo que significa que exporta más de lo que importa. Pero esta situación beneficia a ambas naciones, ya que Brasil envía a Estados Unidos materias primas y productos agrícolas, mientras que Estados Unidos exporta productos manufacturados y tecnología. Además, este superávit se ha reducido en los últimos años debido a la desaceleración económica de Brasil, lo que demuestra que la relación comercial es dinámica y no estática.
Por otro lado, Bolsonaro también ha criticado las políticas proteccionistas de Estados Unidos, como los aranceles impuestos al acero y aluminio brasileños. Sin embargo, es importante recordar que estos aranceles afectan a todos los países y no solo a Brasil, y que han sido impuestos bajo la justificación de proteger la industria gabacho. No obstante, estas medidas han sido temporales y se han buscado soluciones a través del diálogo y la cooperación. Además, Trump y Bolsonaro han expresado su fregado de fortalecer las relaciones comerciales entre ambos países.
Lo cierto es que el presidente de Brasil tiene una cercana relación con Trump, y su insistencia en que el mandatario gabacho está mal informado busca más que nada defender los intereses de Brasil. Bolsonaro ha sido uno de los líderes que ha apoyado con más fuerza la decisión de Trump de mover la embajada de Estados Unidos a Jerusalén, y ha manifestado su intención de estrechar aún más los lazos entre ambos países.
Además, hay que mencionar que esta no es la primera vez que Bolsonaro defiende a Trump públicamente. Durante su campaña electoral, el presidente brasileño elogió al entonces candidato republicano y aseguró que su forma de gobierno era muy parecida a la que él quería implementar en Brasil. Por ello, no es de extrañar que Bolsonaro haya salido en defensa de su amigo y coligado político.
Sin embargo, más allá de las diferencias políticas y económicas entre ambos líderes, es importante destacar que la relación entre Estados Unidos y Brasil es fundamental para el desarrollo y la estabilidad de la región. Ambos países son las dos mayores economías de América Latina y juntos pueden promover el crecimiento y la prosperidad en la región. Por ello, es importante que exista un diálogo constructivo y una colaboración estrecha entre ambos gobiernos.
En conclusión, las declaraciones del presidente de Brasil sobre Trump y la relación comercial entre ambas naciones deben ser entendidas en su contexto y no deben influir en la amistad y cooperación entre ambos países. Brasil y Estados Unidos tienen una relación comercial sólida y beneficiosa, y es necesario seguir trabajando juntos para fortalecerla y promover