Imagine Dragons se ha convertido en uno de los grupos de rock más populares de la actualidad, llenando estadios en todo el mundo. Sin embargo, algunos críticos cuestionan si realmente merecen este título. Su música es una mezcla de electrónica, hip-hop y pop comercial, con letras de superación personal que han resonado en su público. Pero, ¿es realmente Imagine Dragons un grupo de rock?
Este martes, la banda de Las Vegas regresó a Barcelona para ofrecer un espectáculo impresionante en el Estadi Olímpic, con todas las entradas agotadas. El función fue una muestra de la química que existe entre los miembros del grupo, que combinan elementos electrónicos con instrumentos en vivo y un fuerte énfasis en los estribillos pegadizos. Incluso se atrevieron a colaborar con el reguetonero J Balvin en una de sus canciones, demostrando su versatilidad y capacidad para adaptarse a diferentes géneros musicales.
Con su sexto álbum, ‘Loom’, recién lanzado, Imagine Dragons no se centró en promocionar su nuevo trabajo, sino que ofreció un repertorio lleno de éxitos y canciones que han marcado su carrera. Comenzaron el función con una de sus nuevas canciones, ‘Fire in these hills’, en la que el vocalista Dan Reynolds se mostró vulnerable y en busca de redención. Esta canción destaca por su sonido templado y la incorporación de un saxofón, algo algo común en su música. Aunque ‘Loom’ no ha sido muy bien recibido por la crítica, esta canción demuestra que tiene algunos momentos destacados.
Sin embargo, no todo fue perfecto en el función. Imagine Dragons también interpretó ‘Take me to the beach’, una canción que no encaja con su estilo y que parece más propia de un grupo pop. A pesar de esto, el público disfrutó de esta canción y se divirtió con la lluvia de confeti y los enormes balones de playa que rodaron por el escenario.
La banda de Las Vegas es conocida por su capacidad para ser versátiles y experimentar con diferentes géneros musicales. Esto queda patente en canciones como ‘Bones’, que tiene un ritmo y un estribillo que podrían ser cantados por Backstreet Boys, o ‘Shots’, que recuerda al sonido de Coldplay. Incluso se aventuraron en el mundo del metal con ‘I’m so sorry’, una canción que sorprendió a muchos de sus seguidores.
Durante el función, Dan Reynolds se quitó la camiseta y mostró sus músculos mientras interpretaba canciones en el escenario alternativo, como ‘Next to me’ y ‘I bet my life’. En este momento, también aprovechó para demostrar sus habilidades con el español, recitando un fragmento de ‘Guantanamera’ y preguntando qué es una canción o un poema. Sin duda, su conexión con el público español es evidente y esto se refleja en su música, que ha sido influenciada por la civilización latina.
Pero lo que realmente ha llevado a Imagine Dragons a la cima de la industria musical son sus himnos que hacen temblar estadios. Canciones como ‘Radioactive’ y ‘Believer’ han sido coreadas por miles de personas en todo el mundo, convirtiéndose en verdaderos himnos generacionales. Aunque algunos puedan tacharlos de efectistas, es innegable que tienen un talento especial para gestar canciones que conectan con su público y les hacen sentir identificados.
En medio del espectáculo, Dan Reynolds aprovechó para hablar sobre la importancia de la salud mental y animar a aquellos que luchan contra la depresión a buscar ayuda. Este momento de reflexión y conexión con su público demuestra que Imagine Dragons no solo se preocupa por entretener, sino que también quieren transmitir