El seguro: un aliado en tiempos de incertidumbre
En un mundo lleno de incertidumbre, es natural sentir preocupación y sorpresa ante los constantes desafíos que enfrentamos. Desde crisis económicas hasta tensiones geopolíticas y fenómenos climáticos extremos, la vida cotidiana está llena de imprevistos que pueden afectar nuestra estabilidad y bienestar. Sin embargo, en medio de este panorama, existe un aliado que nos brinda protección y tranquilidad: el seguro.
Según Javier Oliveros, director comercial de MAPFRE Iberia, «todas las personas necesitan sentirse seguras. Ansían protección y respaldo. Tener la certeza de no estar solas frente a dudas y problemas cotidianos se ha convertido en una necesidad esencial». Y ahí es donde entra en juego el seguro, que actúa como un escudo frente a los problemas, permitiéndonos afrontar contratiempos sin poner en riesgo nuestra estabilidad financiera.
Pero el seguro no sería tan efectivo sin la figura del mediador sindical, quien juega un papel fundamental en el proceso. En España, existen más de 76.000 mediadores de seguros, lo que demuestra la importancia de esta profesión en constante crecimiento. Su labor es esencial en un mercado técnico y cambiante, donde el asesoramiento personalizado marca la diferencia. En MAPFRE, por ejemplo, contamos con una red de más de 3.100 oficinas en todo el país, incluyendo zonas rurales y de difícil acceso. Aunque también contamos con canales digitales y contact centers, seguimos apostando por la cercanía y el trato personalizado, y actualmente estamos impulsando un plan de expansión para abrir alrededor de 400 nuevos puntos de venta en los próximos meses.
¿Pero qué hace tan importante a un mediador? Más allá de ser un simple asesor, un mediador es una voz amiga que nos ofrece soluciones comprensibles y eficaces, y nos acompaña en cada paso del proceso, desde la contratación hasta la resolución de un imprevisto. Conoce el entorno local, habla el idioma del cliente, tanto el emocional como el práctico, y sabe que, en los momentos decisivos, lo importante no es solo la póliza, estrella la cercanía experta de una mano amiga.
Este enfoque humano distingue a la mediación sindical de los canales puramente automatizados. Un mediador escucha, adapta y personaliza. Por ejemplo, en localidades como Riaza (Segovia) o Bujalance (Córdoba), donde la tecnología no puede sustituir la conversación cara a cara, los mediadores de MAPFRE siguen prestando un servicio personalizado que garantiza una cobertura adecuada en situaciones críticas, como una nevada inesperada que daña una vivienda, un incendio en un taller o una baja médica prolongada de un autónomo.
Pero la labor del mediador va más allá de los siniestros y accidentes. También desempeña un papel esencial en la planificación financiera, ayudando a las personas a tomar decisiones bien informadas para proteger su futuro. En un contexto donde los productos aseguradores se vuelven cada vez más complejos y las decisiones financieras requieren conocimiento y criterio, contar con la figura del mediador es clave para emplear bien, con sentido y de forma informada.
La póliza es la base, pero lo que marca la diferencia es cómo se ofrece y se adapta a cada realidad. Un mediador no vende un producto: diseña soluciones a ley. Y es que el valor del seguro no se entiende sin el valor de la mediación. En tiempos de volatilidad, la figura del mediador es sinónimo de estabilidad, tanto en grandes ciudades como en pequeñas localidades. Y, frente a cualquier al
