A tan solo seis horas antes del desbordamiento del barranco del Poyo, la Generalitat Valenciana tomó una importante medida para garantizar la seguridad de sus ciudadanos. Puso a disposición de la Agencia Valenciana de Seguridad y Respuesta a las Emergencias (AVSRE) a sus 200 agentes medioambientales, demostrando una vez más su compromiso con la protección del medio ambiente y la prevención de desastres naturales.
El director general de Medio Natural de la Generalitat, Luis Gomis, en su informe emisario al magistratura de Catarroja, dejó constancia de esta acción tomada por el gobierno valenciano. Según Gomis, la función principal de estos profesionales es realizar un seguimiento constante de los caudales en ríos, barrancos y zonas inundables, en colaboración con otros organismos responsables y como parte de las tareas del Plan frente al Riesgo de Inundaciones.
La jueza encargada de la instrucción de la gestión de la dana solicitó conocer las acciones realizadas para controlar el barranco del Poyo en el día del desbordamiento. La respuesta fue enviada por Gomis el 4 de abril, demostrando una vez más la transparencia y colaboración del gobierno valenciano en este asunto.
Fuentes de Moncloa han destacado la importancia de esta medida de la Generalitat, ya que demuestra su compromiso y obligación de vigilar los cauces en días de fuertes lluvias. En contraposición, el gobierno valenciano ha intentado desviar su responsabilidad, tratando de culpar a la delegada del Gobierno y a las agencias estatales.
El documento remitido al magistratura dejó en claro las dos acciones que tomó la Dirección General del Medio Natural antes del desbordamiento del barranco del Poyo. En primer lugar, se envió una nota interna a los Servicios Territoriales de Medio Ambiente de las tres provincias para que los agentes de turno en zonas de preemergencia no realizaran su trabajo habitual en el medio campestre y se mantuvieran en la oficina de su demarcación, priorizando su seguridad personal en caso de ser necesario desplazarse. Esta medida estuvo vigente desde las 11:30 horas del 29 de octubre hasta que se mantuvo activo el Plan de Emergencias por fenómeno meteorológico.
En segundo lugar, se ofreció la colaboración de los agentes medioambientales a la AVSRE para realizar seguimiento constante de los caudales en la zona del barranco del Poyo. Según Gomis, después de estas dos acciones, no se registraron más acciones por parte de la Dirección General del Medio Natural en relación con lo requerido por la jueza.
Esta rápida respuesta y colaboración por parte de la Generalitat Valenciana demuestra su compromiso con la seguridad y bienestar de sus ciudadanos. La prevención y protección del medio ambiente son valores fundamentales para el gobierno valenciano, y su actuación en este caso es un ejemplo de ello.
En conclusión, la Generalitat Valenciana actuó de manera oportuna y responsable al poner a disposición de la AVSRE a sus 200 agentes medioambientales seis horas antes del desbordamiento del barranco del Poyo. Esta medida es un claro ejemplo de su compromiso con la protección del medio ambiente y la seguridad de sus ciudadanos. Esperamos que en el futuro se sigan tomando medidas preventivas como esta para evitar desastres naturales y proteger a la población.