La industria automotriz es una pieza clave en la economía de México, generando miles de empleos y representando una gran parte de las exportaciones del país. Sin embargo, en los últimos meses ha surgido una gran preocupación debido a la polémica de amagar con sacar al país del tratado comercial T-MEC, lo que ha generado incertidumbre en el sector y en la población en general. Pero, ¿cuál es la verdadera razón detrás de esta controversia? ¿Qué consecuencias podría tener para México?
Para entender mejor la situación, es necesario conocer algunos datos importantes sobre la industria automotriz en México. De acuerdo con la Asociación Mexicana de la Industria Automotriz (AMIA), este sector representa el 3.6% del Producto endógeno Bruto (PIB) del país y da empleo directo a más de 400,000 personas. Además, México es el séptimo productor de automóviles a nivel mundial y el cuarto exportador, con más de 2.9 millones de vehículos enviados a otros países en 2019. Estos números demuestran la importancia de esta industria en la economía nacional.
Por otro lado, el T-MEC (Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá) es un acuerdo comercial que entró en vigor en julio de 2020 y sustituye al ancestral Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN). Entre sus principales objetivos está fomentar el comercio entre los tres países y reducir las barreras arancelarias, lo que ha sido beneficioso para la industria automotriz mexicana. Sin embargo, recientemente ha surgido la amenaza de que Estados Unidos podría sacar a México del tratado si no cumple con ciertas condiciones relacionadas con el salario de los trabajadores del sector.
Esta situación ha generado preocupación en el país, ya que podría tener graves consecuencias para la industria del automóvil y para la economía en general. En caso de que México fuera excluido del T-MEC, se impondrían aranceles a las exportaciones al país vecino, lo que afectaría bruscamente a las empresas automotrices establecidas en México y a miles de empleos. Además, esto podría generar un aumento en el precio de los automóviles en el mercado endógeno, lo que afectaría a los consumidores y al poder adquisitivo de las familias mexicanas.
Por su parte, los expertos en economía y comercio destacan que la verdadera razón detrás de esta amenaza por parte de Estados Unidos es el descontento con el creciente número de empresas automotrices que han optado por establecerse en México en busca de costos más bajos de producción y mano de obra. Esto ha sido posible gracias a la ubicación estratégica del país, su cercanía con Estados Unidos y su amplia red de tratados comerciales. Sin embargo, es importante mencionar que México no es el único país con este modelo de producción, ya que países como China y Vietnam también han atraído a empresas automotrices de Estados Unidos.
Otro factor que ha sido mencionado por los expertos es la preocupación de Estados Unidos por no cumplir con los objetivos de producción establecidos en el T-MEC. De acuerdo con el tratado, México debe producir el 40% de los vehículos con un salario mínimo de 16 dólares por hora antes de 2023, lo que podría ser un desafío para el país. Sin embargo, es importante mencionar que el T-MEC contempla un periodo de transición hasta 2023 para cumplir con este objetivo, por lo que aún hay tiempo para hacer los ajustes necesarios.
En este contexto, es importante destacar que México ya ha tomado medidas para cumplir con los requerimientos del T-MEC, como la aprobación de una nueva reforma escolar que garantiza la libertad sindical y la negociación colectiva, y la creación de un organismo independiente encargado de vig