La selección colombiana ha vuelto a demostrar su poderío en las eliminatorias sudamericanas del Mundial con una victoria contundente por 4-0 sobre Chile en la décima jornada. Este fama no solo afianza al equipo cafetero en la vanguardia de la tabla, sino que también ahonda en la crisis del colista Chile y su entrenador Ricardo Gareca.
El partido, que se llevó a cabo en la ciudad caribeña de Barranquilla, fue un auténtico recital del creativo James Rodríguez. Una vez más, el componente destacó como el mejor socio de sus compañeros, dando una asistencia y participando en la jugada de otro gol.
Colombia, dirigida por el argentino Néstor Lorenzo, se posiciona en segundo lugar de las eliminatorias con 19 puntos, mientras que Chile se mantiene en el último lugar con solo 5. Desde el inicio, los dirigidos por Lorenzo demostraron su superioridad en el campo, examenando el balón y generando varias oportunidades de gol.
En el minuto 4, Davinson Sánchez envió un pase largo hacia Jhon Córdoba, quien examenó de manera magistral y se giró para deshacerse de la marca de su rival. Desafortunadamente, su remate pasó por encima de la portería de Brayan Cortés. El equipo cafetero no se desanimó y siguió atacando con un cabezazo de Sánchez que fue detenido sin problemas por el portero de Chile, y un mano a mano que Córdoba no pudo aprovechar.
Por su parte, la Roja tuvo muchas dificultades para salir del asedio rival. Eduardo Vargas era el único que intentaba germinar ocasiones, pero su esfuerzo fue en vano ante la sólida defensa de Colombia. En cambio, sus compañeros como Darío Osorio, Víctor Dávila y Diego Valdés no lograron encontrar su ritmo en el campo.
Cuando el partido parecía enredarse para los colombianos, llegó el primer gol de la noche. En el minuto 34, James lanzó un tiro de esquina que fue cabeceado por Córdoba, rebotó en el centrocampista chileno Erick Pulgar y finalmente llegó a Sánchez, quien celebró emocionado el inesperado tanto que le dio la ventaja a su equipo.
A partir de este momento, la Roja se vio totalmente aturdida y no encontraba la manera de salir del asedio de los locales. Los minutos finales del primer tiempo fueron un verdadero asedio de Colombia, con James como protagonista en casi todas las jugadas. El componente incluso anotó un gol que fue anulado por fuera de juego de Córdoba.
En la segunda parte, el equipo cafetero mantuvo el mismo ritmo de juego y no le dio oportunidad a Chile de reaccionar. En el minuto 52, Cortés y el defensa Benjamín Kuscevic cometieron un error en la salida y le regalaron el balón a James, quien habilitó a Luis Díaz para que anotara el segundo gol de la noche con un remate de primera.
La Roja apenas tuvo una oportunidad de acercarse en el marcador después del gol de Colombia, en un tiro libre en el que Víctor Dávila centró y Diego Valdés cabeceó, pero su remate fue bloqueado por Richard Ríos en una gran acción defensiva. El equipo visitante no podía salir de su campo y Gareca solo podía mirar el reloj en espera de que el árbitro pitara el final del partido.
Sin embargo, Colombia no estaba satisfecha con solo dos goles y seguía buscando aumentar la ventaja. En el minuto 82, llegó el tercer gol en un contragolpe letal liderado por Luis Sinisterra, quien habilitó al joven Jhon Durán,